¿Os gustan los pug negros? Pues en este artículo profundizaremos más en ellos para conocerlos un poquito más.

El pug o carlino es una raza de perro que se está convirtiendo en muy popular en los últimos años. Son excelentes amigos para la familia, con buen carácter, graciosos y divertidos. Les encanta jugar con los suyos y tienen una forma de ser muy peculiar, lo cual ha ayudado a que tanta gente los quiera.

Los colores más habituales en el pug son naranja, beige y leonado, sea en su variante plateada o albaricoque. Una de sus características físicas más notables es su máscara, siempre de color negro, debido a la cual también se le llama carlino: este término proviene del actor italiano del siglo XVIII Carlo Antonio Bertinazzi, cuyo aspecto al interpretar a un personaje en el teatro era muy similar a la máscara del pug. Además de esta máscara, el pug también debe tener una línea negra desde la parte posterior de la cabeza hasta la cola (conocida como estría o señal), así como las orejas, los pómulos y una pequeña mancha en la frente (el diamante) de color negro.

El pug también puede ser de color negro puro. Desde hace siglos se conocían casos de pugs que habían nacido negros, primero en sus orígenes en China, y más tarde en Inglaterra, donde muchos de ellos fueron sacrificados por considerarse el negro un color inadecuado para esta raza. Ya a finales del siglo XIX el carlino negro empezó a aceptarse y a llevarse a exposiciones, en principio por la criadora Lady Brassey, quien hizo un gran trabajo en la popularización de esta raza en Inglaterra.

Como peculiaridad de los pug negros podemos señalar que solo tienen una capa de pelaje, a diferencia de los de color leonado, que poseen doble capa. Para que un pug tenga el manto y la piel de color negro es necesario que los dos progenitores sean de color negro, ya que esto depende de un gen recesivo.

En la actualidad los pug de color negro puro no son los más fáciles de encontrar, ya que requieren ser criados específicamente y con cuidado, aunque gracias al trabajo de algunos criadores se están consiguiendo ejemplares de color negro que gozan de buena salud, tan robustos y sanos como los de otros colores. Si tienes un perrito pug de color negro no es aconsejable que lo expongas mucho al sol, ya que por un lado esta raza no aguanta bien el calor, y por otro lado un exceso de sol puede producirle despigmentación, haciendo que su color negro se aclare.